lunes, 26 de octubre de 2009

Podria aparecer nuevo grupo armado en Chiapas

Obispo dice que hay grupos que promueven nuevo movimiento armado en Chiapas

El obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi, afirmó que hay grupos que están en favor de crear un nuevo movimiento armado, y teme que haya represalias contra sacerdotes, catequistas y diáconos.

En su mensaje semanal, el jerarca católico afirmó que "no faltan personas y grupos, no alentados ni apoyados por la diócesis, que siguen pensando que no hay otra alternativa más que un nuevo movimiento armado".

En Chiapas tuvo lugar en 1994 el levantamiento armado de zapatistas en el que estuvieron involucrados ex catequistas de la diócesis de San Cristóbal de las Casas, ciudad colonial chiapaneca que se convirtió entonces en el epicentro informativo del movimiento rebelde.

La semana pasada las autoridades mexicanas capturaron en Chiapas a tres personas con un arsenal oculto en un rancho de la zona, compuesto por 328 granadas, 4 cargas de dinamita, 40 fusiles de asalto, y 5 pistolas calibre 38 súper, 45 y 9 milímetros.

De acuerdo con la versión del Gobierno de Chiapas, uno de los detenidos dijo pertenecer a una organización social de fachada, mientras que dos de los detenidos afirmaron haber sido "adiestrados militarmente un mes en Guatemala recomendados por un catequista de la diócesis de San Cristóbal".

Arizmendi afirmó que algunos medios informativos han señalado a sacerdotes, catequistas y diáconos como "generadores de violencia, que incitan a una revolución armada, aliados a movimientos contra el sistema, provocadores de planes de saqueos y destrozos públicos, con ocasión de los aniversarios en el año 2010 de la Independencia (1810) y de la Revolución Mexicana (1910)".

Agregó que pese a la insistencia de la diócesis en defender que sólo por medios pacíficos se puede lograr una transformación social, siempre hay temor de que involucren y encarcelen a sacerdotes con "pruebas falsas".

El obispo aseguró que hay una campaña para involucrar a sacerdotes en la promoción de la violencia.

"Temo que intenten 'sembrarles' pruebas falsas, para presentarlos como implicados en el tráfico de armas y de drogas, y así justificar su posible encarcelamiento. Cuando todo lo que digas o hagas se distorsiona y se malinterpreta, no hay lugar para defender la verdad y la inocencia", expresó el religioso.

Admitió que en muchas partes del país "hay inconformidad social" y destacó que "es un hecho que no se puede ocultar".

Explicó que el descontento se debe al creciente empobrecimiento de la población, el desempleo, el hambre, el abandono del campo, la insuficiencia de la instituciones educativas y de salud, la migración, la corrupción y la inseguridad.

Agregó que todo se ha agravado por la crisis globalizada del sistema económico.

Arizmendi recordó que en la década pasada, luego del alzamiento armado zapatista en 1994, se levantaron acusaciones contra los religiosos que provocaron la persecución, hostigamiento y encarcelamiento de activistas de la diócesis.

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